Progreso, Yucatán: todo lo que se puede hacer en este lugar
Progreso es uno de los puertos en los que puedes divertirte mucho, si sabes qué hacer ahí.
Incontables son los productos y mercancías que entran a Yucatán por la vía de Progreso. Este puerto ha crecido junto con la entidad y, a pesar de este desarrollo, sus pobladores conservan el encanto playero y la tranquilidad proverbial de su población.
No exageramos, una visita al Sureste mexicano que no contemple este puerto está incompleta.
Por ello, aquí hablaremos del pasado de esta ciudad, algunas curiosidades de su entorno, cómo llegar desde Mérida y los atractivos que debes recorrer para completar esa experiencia inolvidable en Yucatán.
Progreso: el puerto grande de la Península de Yucatán
Progreso se inauguró, con la categoría de pueblo, el 1 de julio de 1871.
El comerciante Juan Miguel Castro fue el promotor de este puerto y, por ello, el nombre oficial de esta localidad es Progreso de Castro.
Desde su apertura al comercio internacional, su muelle ha recibido embarcaciones de todos los países del mundo, en especial, de los Estados Unidos de América, Cuba, Alemania y Francia.
El desarrollo del puerto fue tan rápido que, a comienzos de 1875, el Congreso del Estado de Yucatán le concedió, por decreto, el carácter de villa y, en octubre del mismo año, el título de ciudad.
En la actualidad, luego de constantes ampliaciones, el muelle de Progreso tiene la capacidad de atender simultáneamente a dos mega cruceros de la cuarta generación.
Esta circunstancia hace de esta localidad el lugar de desembarco de miles de turistas que, anualmente, visitan los sitios arqueológicos, Pueblos Mágicos de Yucatán y prueban la comida típica de Mérida.
5 curiosidades de Progreso
Cinco datos curiosos de Progreso que debes conocer antes de visitar este puerto son los siguientes:
- Progreso es uno de los 7 municipios de Yucatán que no tiene un nombre de orígen maya. Los otros son: Mérida, Río Lagartos, San Felipe, Santa Elena, Quintana Roo y Valladolid.
- El muelle fiscal de Progreso mide 6.5 km de longitud, lo que lo vuelve el más grande del mundo. Su estructura es de hormigón armado.
- El tramo Mérida-Progreso de la carretera federal 261 tiene 8 carriles que, al iluminarse en la noche, son un espectáculo del movimiento y la velocidad.
- Cuando se comenzó una ampliación del muelle de Progreso, se construyó desde el interior del mar hacia la orilla. Como se rumoró que la obra quedaría inconclusa, se le llamó “Isla Cervera” por el apellido del gobernador de entonces.
- Los dulces de calabaza, yuca y mazapán que se venden en el malecón son una especialidad progreseña que nunca olvidarás.
¿Cómo llegar a Progreso, Yucatán?
Si estás planeando visitar Progreso muy pronto, entonces te interesa conocer cuáles son las mejores formas de viajar a este lugar.
De forma general, puedes:
- Viajar en camión o combi
- Viajar en automóvil
Cómo llegar a Progreso en transporte público
Dirigirse a Progreso, en autobús, te permitirá convivir con los lugareños que se transportan de vuelta a sus hogares; además, entrarás en contacto directo con la vida real de esta comunidad.
Si esta experiencia te interesa, dirígete a la terminal de la Operadora Autoprogreso, situada en la calle 62 entre 65 y 67, del Centro Histórico de Mérida.
Los viajes comienzan a las 5:45 de la mañana y concluyen a las 20:00 horas.
El recorrido dura 55 minutos aproximadamente y el panorama de la vía será exactamente el mismo que el que recorremos en automóvil.
Cómo llegar a Progreso en automóvil
Desde la ciudad de Mérida es muy fácil conducir hasta Progreso.
Si partes del Centro Histórico, toma la calle 60 y dirígete hacia el norte. Al seguir este recorrido contemplarás lo próspera que es la ciudad de Mérida.
Antes de atravesar el Periférico Norte, verás una de las mejores zonas para vivir en Mérida. En este rumbo se encuentran escuelas privadas, fraccionamientos residenciales y plazas exclusivas como La Isla.
Al pasar el Periférico Norte, conducirás sobre la carretera federal 261. Esta autopista tiene ocho carriles y está perfectamente iluminada en la noche.
Seguro apreciarás, en este tramo, el crecimiento y bonanza que está experimentando esta área, puesto que los mejores lotes de inversión y terrenos campestres del estado de Yucatán se ubican a ambos lados de esta vía.
Entre estos espacios, situados en los ex plantíos de una hacienda emblemática de Yucatán, se encuentran dos desarrollos prometedores: Olivos y Hacienda de San Ignacio de nuestra promotora Kab-Ché.
Poco antes de llegar a la entrada a Progreso se te presentará en el panorama el Parque Eólico de Yucatán.
Estos sorprendentes generadores de energía eléctrica se inauguraron en 2020, luego de una inversión de 155 millones de dólares.
Cuando veas estos molinos eólicos estarás a pocos minutos de tu destino: el puerto de Progreso de Castro.
7 cosas qué hacer en Progreso, Yucatán
1. Toma un baño en el Golfo de México
No hay aguas más seguras que las del litoral yucateco para aprender a nadar o darse un chapuzón.
La poca profundidad de las aguas y la tranquilidad de sus corrientes hacen que bañarse en aquí sea una oportunidad para aquellos que todavía desconocen el grácil arte de dar brazadas.
Casi siempre es posible caminar muchos metros sin que el nivel del mar rebase nuestro pecho. Por ese motivo, seguramente verás entrenar a los atletas que se preparan para un triatlón en el litoral yucatanense.
Por lo anterior, si visitas Progreso date un clavado. Eso sí, trae lo necesario para disfrutar del mar y sigue las indicaciones básicas de seguridad.
2. Recuerda playar en el malecón de Progreso
Pasear por un sitio pintoresco es un arte que toda pareja o familia debe realizar al menos una vez en la vida.
El malecón se inauguró en 1928, mide 6.5 km y recientemente fue remodelado para hacerlo más atractivo.
En su extremo de partida, se encuentra una estatua en honor a Juan Miguel Castro.
Mientras caminas por el malecón encontrarás a simpáticos vendedores de golosinas, frutas enchiladas, algodones de azúcar, melcochas y palanquetas. Si amas los dulces tradicionales, disfrutarás de los sabores en torno al malecón.
Además, por si fuera poco, los mejores restaurantes de mariscos y pescados se encuentran a la vera de este espacio entrañable de Progreso de Castro.
3. Luego de admirar la aduana y el faro, recorre el mercado
Si vas a un sitio de gran tradición como Progreso debes conocer sus principales sitios históricos y hablar con su gente.
La aduana y faro de Progreso los construyó el gobierno federal hace más de un siglo.
El faro fue edificado por el ingeniero norteamericano John W. Gleen y, si te apasiona la historia, encontrarás en torno a estos sitios placas conmemorativas de importantes acontecimientos de la revolución mexicana.
Después de este recorrido, visita el mercado municipal para hablar con los progreseños quienes son los mejores charlistas de la región y adquiere también pescados y otros productos de la región.
4. Experimenta la aventura de una moto acuática
Si quieres atesorar un momento de sana diversión, debes probar tu pericia en alguno de los deportes acuáticos que se practican en Progreso.
Actívate y, con las debidas medidas de seguridad, toma una lección de windsurf, veleo o paddle board o renta un kayak o una moto acuática.
5. Haz un intento en la pesca
Con tus amigos o familia no hay nada que genere más momentos memorables que la pesca.
Pregunta en el malecón y conseguirás rápidamente un perito que te llevará a los sitios correctos para pescar.
Las principales especies comestibles de la región son el mero, el pulpo maya y la langosta. Es posible pescar o adquirir estos ejemplares, de acuerdo con la temporada, las condiciones climáticas y, a veces, la veda a la que está sometida la industria pesquera.
Pasar un buen rato probando tu suerte con el anzuelo, hará que tú y tus acompañantes se enamoren del mar y la playa de Progreso.
6. Admira la naturaleza en El Corchito
Para conectarte con la naturaleza, es preciso que recorras las áreas donde se protege la biodiversidad de Yucatán.
La Reserva Ecológica de El Corchito es popular en Progreso, ya que se llega a ella en lancha.
Si emprendes esta aventura ecológica, recuerda llevar tan solo lo necesario o tendrás que depositar tu mochila en los casilleros de la entrada.
Ten en cuenta que está prohibido alimentar a la fauna del lugar para no alterar sus ciclos reproductivos y evitar que las iguanas y otros animales proliferen más de lo recomendado.
El principal atractivo de El Corchito son sus cuatro ojos de agua dulce que afloran directamente del suelo, cada uno de ellos tiene distinta profundidad y forma.
Si llegas en la mañana, cuando hay pocos visitantes en la reserva, verás que los ojos de agua del corchito son tan cristalinos que es posible admirar su fondo.
En cuanto a los costos, el acceso a los niños de 5 a 10 años y adultos mayores con credencial del INAPAM es de $35 MXN; Adultos con la nacionalidad mexicana $45 MXN y extranjeros $90 MXN.
El Corchito abre de lunes a domingo de 9:00 a 17:00 horas y te recomendamos ir lo más temprano posible.
7. Broncearse y enamorarse en Progreso son uno mismo
Darse un beso en el Callejón del Amor le dará la mejor de las suertes a tu relación.
Aunque no lo creas, hace tiempo el Callejón del Amor era un lugar en Progreso que se llamaba La Mugre. En este sitio se solían acumular tantos desechos al punto que todos se quejaban de la mala impresión que generaba ante el turismo.
A los progreseños les molestó tanto que los visitantes vieran el estado de este sitio que se decidió cambiar su faz. El éxito se logró en febrero de 2022, el mismo día de San Valentín.
Así que, luego de broncearte sobre la arena, camina hacia el Callejón del Amor.
Encontrarás ahí un letrero enorme que dice “Enamórate de Progreso” hecho con flores de pétalos rojos. Tropezarás con un gran corazón que tiene pintados un atardecer, el faro y las gaviotas de la playa.
Si visitas el Callejón del Amor de noche estará iluminado y podrás tomar fotos de tu visita a Progreso, obviamente, con tu acompañante.
Invertir en Yucatán es una oportunidad para los determinados
México es un país rodeado por el Atlántico y el Pacífico, esta posición hace que sus puertos tengan gran importancia para el comercio internacional.
Además, algunas de las playas de la república mexicana, son de las más hermosas del continente.
El Puerto de Progreso tiene una de las mejores playas de Yucatán, su muelle recibe continuamente a las mercancías y materiales para la zona industrial y, también, a multitudes de turistas.
Esta capacidad turística e industrial, junto con la paz y seguridad del estado, han motivado en los últimos años un crecimiento económico sorprendente.
Por esto, invertir en el campo yucateco es una oportunidad para quienes aspiran a una vida segura y tranquila.
La calidad de vida será tu patrimonio
Yucatán está creciendo aceleradamente y su desarrollo económico nos permite, hoy en día, invertir a favor nuestro en condiciones muy ventajosas.
Adquirir un bien raíz en Yucatán, justo ahora, es una oportunidad de oro y una forma de hacer crecer tus ahorros, porque los terrenos en preventa tienen el mejor precio por metro cuadrado y, por ello, tendrán en poco tiempo, un alto retorno de inversión.
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Si te gustó esta guía para llegar y conocer el puerto de Progreso, visita otros artículos lifestyle de nuestro blog como La zona arqueológica de Dzibilchaltún: todo lo que debes saber o 5 cosas que hacer en Mérida, Yucatán.
